Identidad visual experimental para taller de cerámica
Del gesto manual a un sistema visual aplicado a marca
El proyecto Argila es un proyecto personal de exploración sobre cómo las texturas físicas pueden convertirse en lenguaje visual. El reto era desarrollar una identidad para un taller de cerámica que reflejara su esencia material, evitando soluciones digitales previsibles y buscando un enfoque más honesto y expresivo.
Para ello, trabajé directamente con barro, agua y papel, experimentando con gestos, manchas y texturas que más tarde se transformaron en recursos gráficos aplicados al sistema visual.
A partir de estas exploraciones manuales se desarrollaron iconos, formas base y composiciones que sirvieron como punto de partida para el logotipo y los elementos secundarios de la marca. La digitalización de estas texturas permitió crear un lenguaje visual flexible, capaz de adaptarse tanto a soportes impresos como digitales sin perder su fuerza y autenticidad.
El proceso combinó experimentación física y refinamiento digital, dando como resultado una identidad que comunica tactilidad, artesanía y presencia.
Argila demuestra cómo el diseño puede surgir de la materia y cómo un enfoque experimental puede convertirse en un sistema visual sólido y funcional.
¿Hablamos?
Si buscas una diseñadora gráfica con criterio visual, versatilidad y capacidad de aportar en proyectos diversos, estaré encantada de colaborar con vuestro equipo.